Guanajuato supera la sequía más larga de los últimos 25 años.

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🌱 Después de al menos tres años y medio de una crisis hídrica histórica, Guanajuato ha salido oficialmente de la sequía. Gracias a las intensas lluvias de las últimas semanas, el 97% del territorio, es decir, 45 de sus 46 municipios, fue declarado “sin sequía” por el Monitor de Sequía de México de la CONAGUA.

🗓️ La crisis comenzó a notarse en febrero de 2022, después de una baja temporada de lluvias que dejó a prácticamente todo el estado clasificado en el primer nivel de sequía.

⚠️ A pesar de una leve mejoría ese año, la condición no se revirtió y, por el contrario, se agravó hasta alcanzar su punto más crítico entre octubre de 2023 y junio de 2024, cuando hasta 40 municipios padecieron sequía extrema y 16 llegaron al nivel “excepcional” respectivamente.

📍 Los 5 municipios más afectados fueron San Miguel de Allende, Atarjea, Victoria, Xichú y San Luis de la Paz.

🌾 El sector agrícola y ganadero fueron los sectores más castigados, siendo 2023 que las pérdidas fueron más graves, además del registro alto de presas secas y abatimiento de los mantos acuíferos.


El alivio comenzó con la reciente temporada de lluvias.

🌧️ Solo en el último mes, el estado acumuló más de 118 milímetros de precipitación, casi la mitad del total registrado en todo lo que va de 2025. Los pronósticos indican que esta tendencia favorable continuará.

El impacto de las lluvias se refleja directamente en los cuerpos de agua. De manera extraordinaria, la captación en las presas del estado durante el mes de junio equivale al 55% de toda el agua que se recolectó en los primeros seis meses de 2024, evidenciando la magnitud de la recuperación.

🟡 A la fecha, únicamente el municipio de Pénjamo permanece con un nivel de sequía leve (nivel 1), marcados como “anormalmente seco” en el monitor nacional.

El último período de sequía más severo que se había registrado duró 9 meses, entre 2011 y 2012.

Esto no significa que se ha resuelto la disminución en los mantos acuíferos acelerada en los últimos años. La llegada de la lluvia es un alivio, pero la conciencia sobre el cuidado del agua debe ser permanente.